Todos nos equivocamos. La deferencia radica en que unos se equivocan por cobardía; no se atreven a dar ese paso, no se atreven hacer aquello que les encantaría por temor precisamente a equivocarse. No sabrán nunca si les hubiese salido bien. Los otros puede que también se equivoquen pero con la satisfacción de haberlo intentado. Quizá les ha resultado!!
Un tanto por ciento muy elevado de la gente que convive habitualmente conmigo pensaba que era una tontería que estudiase filosofía "no sirve para nada" dijeron después de haber hecho la pregunta del millón: ¿ eso te va a dar trabajo? "Te estas equivocando" añadieron. Pasé de todos y pese a mi de edad me atreví. Al día de hoy estoy totalmente convencida de que los que se equivocaban eran ellos. Más le valdría un poco de filosofía y menos televisión.